Filosofeando

Hoola mis siempre muy queridas y recordadas amigas ,mis angelitos terrenales ... ay como las quiero!! .

Ando de pasadita por mi segunda estancia ,mi rinconcito en donde hay puro SENTIMIENTO.

Mis amores de amigas quisieras ser mas creativa ,ser mas renovadora ,pero estoy CASI EN CERO JIJI.Estoy algo mermada de ideas ,pero como un buen ser humano ,buscando una escusa perfecta ...me nace del alma que no nesecito rebuscar algo muy creativo,sin mucho pensar,solo se que siento que ...¡¡¡LAS QUIERO MUCHISISIMO!!!.

Siento , voy teclaendo de maraviillas el gozo de vivir ,cada intante los momentos deliciosos que nos presenta la vida y de las luces que hay en nuestro caminar .

Vivo pensando en mi vida ,con todos sus momentos ,con la magia de cada uno de ellos ,¡vaya que he disfrutado! ...los buenos y los malos . Que mejor vestido ,que mejor par de zapatos ,que mejor plato de comida ....QUE ES LA VIDA .

Mis angelitos terrenales paso y dejo a TODAS mi cariño senciillo ,verdadero para que nunca se sientan solitas .

Aprovecho esta oportunidad para dejar mis saluditos a otros angelitos que se me han escapado y que espero que algunas de ustedes puedan ser mis mensajeras por favor ,se que SOMOS MUJERES MUY OCUPADAS ,EN ESO ANDAMOS SIEMPRE ,estos cariños y recuerdos son para :

Teresita Controne

Felina

Pali

Anita de Colo

Evelin

Chichina .

Brisita de amor .

Quiero saber como estan ? yo por el momento no he podido visitarlas pero SI recordarlas.Si se me escapo algun angelito diga YO JIJI.

A mis restantes angelitos se que siempre estan presentes .

Que tengan una semana satisfactoria para cada una de ustedes , sean luz y calor el uno con el otro.

Algo en que pensar.

Hu-Song, filosofo de Oriente, contó a sus discípulos la siguiente historia:
"... Varios hombres habían quedado encerrados por error en una oscura caverna donde no podían ver casi nada .

Pasó algún tiempo, y uno de ellos logró encender una pequeña tea. Pero la luz que daba era tan escasa que aun así no se podía ver nada. Al hombre, sin embargo, se le ocurrió que con su luz podía ayudar a que cada uno de los demás prendieran su propia tea y así compartiendo la llama con todos la caverna se iluminó".

Uno de los discípulos pregunto a Hu-Song:¿Qué nos enseña, maestro, este relato?
Y Hu-Song contestó : Nos enseña que nuestra luz sigue siendo oscuridad si no la compartimos con el prójimo. Y también nos dice que el compartir nuestra luz no la desvanece, sino que por el contrario la hace crecer.